viernes, 30 de septiembre de 2016

Érase una vez una abuela que iba a la escuela de pintura...

Ubrique, pintado por Esperanza Izquierdo
En las clases de Pedro Lobato Hoyos, 2004


Por Esperanza Cabello

Siempre hemos admirado a nuestra madre por su calidad humana, por su forma de ser, por su generosidad, por su bondad, por su paciencia... pero, sobre todo, por su tesón y su fuerza de voluntad.
Y los cuadros que mostramos a continuación son el mejor ejemplo de esa capacidad de esfuerzo, de ese tesón, de ese interés por todos los detalles.
El pintor Pedro Lobato había sido alumno de nuestro padre, precisamente fue él quien, siendo aún estudiante, le organizó su primera exposición, y siempre hubo entre ellos una afinidad especial. 
Cuando Pedro empezó a dar clases de pintura, nuestro padre insistió mucho para que nuestra madre fuera a esas clases, pero ella, humilde y discreta, no se sentía capaz de pintar.
Un par de años después de la muerte de nuestro padre, ella se decidió a comenzar esas clases, realmente se sentía muy poco artista, pero las clases de Pedro eran muy especiales, era un maestro paciente y acostumbrado al trato con los demás, y nuestra madre comenzó a sentirse muy cómoda en esas clases.
Al principio no estaba muy contenta con los resultados, pero poco a poco, a fuerza de voluntad y con mucha ayuda del maestro, al que admiraba cada vez más, fueron saliendo poco a poco las que, para nosotros, son las mejores obras de arte que pueda haber en el mundo: los cuadros de nuestra madre.


Y es que, como decía su maestro
"La belleza de una obra de arte está en los ojos de quien la mira"


Para todos nosotros los cuadros de nuestra madre son un verdadero tesoro, reimos con ella al ver aquellas "sardinas", la animamos con las palmeras del jardín o con aquellas marinas tan difíciles, pero nos abrumaba su tenacidad, y poco a poco fue pintando con verdadera maestría, atreviéndose a emular a Van Gogh, a Rodríguez Cabas o al propio Pedro.
Ante las palabras de elogio, ella siempre se quitaba mérito, y se lo daba todo al maestro, pero cada vez admirábamos más sus pinturas.
Hoy hace tres meses que murió nuestra madre, tristemente el mismo mes que su maestro de pintura, su admirado Pedro, y hemos reunido entre todos los hermanos los cuadros que ella pintó, con su ayuda, para sus hijos y para sus nietos. Con todo nuestro cariño y toda nuestra admiración.




















 
Tras varios años de trabajo se dio por satisfecha con el resultado, consiguió por fin pintar un cuadro para cada hijo y para cada nieto. Tuvimos la suerte de que este último, el de los árboles, estuviera acompañado, además, de un pequeño cuento para su nieta de cuatro años, la más pequeña en aquel entonces, con la que disfrutaba contando cuentos que a su nieta le encantaban.



 Para Esperanza la pequeña.
Érase una vez...
Una abuela que iba a la escuela de pintura y pintó estos árboles para su octava nieta.
¿Te gustan?
Para que tengas un recuerdo,
Abuela Esperanza


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jueves, 29 de septiembre de 2016

Proba y Eudocia: Fe y Cultura, por María José Cabezas Cabello

Artículo de María José Cabezas Cabello en la Revista 21






PROBA Y EUDOCIA: FE y CULTURA


Las poetas Faltonia Betitia Proba y Athenais Eudocia, en los siglos IV y V respectivamente, escriben un mismo tipo de composición poética: el centón literario.  Se trata de poesías compuestas de fragmentos tomados de uno o más poetas y unidos entre sí. La palabra centón, en su acepción literaria, significa poema compuesto a base de palabras, hemistiquios o versos enteros tomados de otros poemas, sobre todo de Homero, Virgilio y Ovidio, para expresar un argumento nuevo.

De Proba solo conservamos su poema el centón  virgiliano “Sobre los méritos de Cristo”[1]. Para componer esta obra poética escoge las palabras, medios versos o versos completos de Virgilio y los dispone creando un nuevo poema de hexámetros dactílicos que trata de diferentes episodios de la Biblia, tanto del A.T. como del N.T. Los episodios de los que trata en su poema son: La Creación, Adán y Eva, la serpiente, Caín y Abel y el Diluvio; y del N.T. el nacimiento de Cristo, matanza de los niños inocentes, Juan el Bautista, la Tentación de Cristo, el Sermón de la Montaña, el joven rico, la expulsión de los mercaderes, la última cena, la traición de Judas, crucifixión, resurrección y Ascensión.

En cuanto a la emperatriz Eudocia (casada con Teodosio II en 421)  es una de las figuras más relevantes y menos reconocidas de la poesía griega tardía (s. V). Compuso varias obras poéticas entre las que destacan  su Centón Homérico compuesto con la misma técnica literaria de Proba pero sirviéndose de los versos de Homero. Consta de 2.354 versos y relata una cincuentena de episodios bíblicos, dedicándole más atención al Nuevo Testamento que al Antiguo.

Las poetas Proba y Eudocia se ocuparon del estudio bíblico, de su exégesis y transmisión a través de la poesía: el centón literario. No era frecuente en esta época que las mujeres se dedicaran a esto, tareas que ejercían casi en exclusividad los hombres, exceptuando el conocido Círculo del Aventino de Roma, compuesto por mujeres estudiosas de la Biblia que a finales del s. IV ayudaron a Jerónimo en su traducción de la Vulgata.

            Al escoger Proba y Eudocia los episodios de la Biblia que les interesaban para sus composiciones poéticas nos han transmitido su especial cosmovisión religiosa. Ellas encontraron una fórmula cultural creativa (el centón literario) para interpretar la Biblia y darla a conocer. Por ello merecen ser recordadas al lado de los autores cristianos que interpretaron las Escrituras con las categorías filosóficas de su época.






[1] Proba, Poema Sagrado, “Sobre los méritos de Cristo”,  Biblioteca de  Patrística, nº 99, Editorial Ciudad Nueva,  Introducción, Traducción y Notas de María José Cabezas Cabello, 2015.

lunes, 26 de septiembre de 2016

Leyendas corsas

 



Por Esperanza Cabello


Tenemos mucha suerte de ser muy aficionados a los libros y a la lectura, y además nos encantan las leyendas tradicionales. Así que cuando nuestra hija nos ha regalado este pequeño librito después de un viaje por el Mediterráneo nos hemos puesto manos a la lectura rápidamente y nos ha encantado ver cómo el culto a los muertos y los usos extraños de las plantas son comunes a muchos países.

Más aún nos ha llamado la atención el uso de la palabra "maquis", palabra francesa que viene del corso y del italiano "macchia", y se refiere al paisaje de arbustos y matorrales. Esta palabra se comenzó a utilizar para designar a los grupos de guerrilleros de la resistencia francesa, que se escondían en zonas montañosas y bosques.

Muchos de los guerrilleros españoles que combatieron en Francia volvieron a España luchando como guerrilla antifranquista, y trajeron el nombre consigo. Nunca nos habíamos planteado el origen de esta palabra tan "triste" en realidad, pero lo encontramos aquí, en un entorno, el corso, que se parece tantísimo al nuestro. 

Son las de Córcega unas sierras agrestes con gente orgullosa y trabajadora, montañas en las que crecen con facilidad, como en las nuestras, los gamones que, como aquí, tienen usos increíbles.

Traducimos un trocito de esta leyenda

... Durante esta noche luchaban los mazzeri de este lado de los montes con los mazzeri de aquel lado de los montes. Luchaban armados con ramas de asphodelus con hojas lanceoladas. El asphodelo, del que Victor Hugo evoca "su fresco perfume", prolifera en todo el maquis corso. Recuerdo los colchones en casa de mis abuelos en Bavella, rellenos de asphodelos secos. En el instante en que me movía, crujía espantosamente la cama. Era muy incómodo, pero "sano", según parece ¿Quién sabe? Quizás la planta nos protegía de las visitas nocturnas inoportunas de los difuntos familiares...

Los asphodelos son también llamados flores de los muertos, o mejor candelli o luminellu (velas o candiles) por su forma y porque antaño, antes de la electricidad, los utilizaban como antorchas para desplazarse en la oscuridad. Crecían en las praderas infernales y estaban dedicados a Hades y a Perséfone. Los griegos pensaban que eran del gusto de los muertos y los plantaban alrededor de las tumbas de sus difuntos. Flor salvaje, el asphodelo prolifera en cualquier suelo y florece en la primavera, tiñendo todo el maquis con sus ramos rosados. Incluso ha sido comestible. Se hacía con su bulbo una especie de torta que se llamaba "pan de los pobres". También posee virtudes médicinales y resulta bueno para todo tipo de males, desde el dolor de dientes hasta la tos recalcitrante, pasando por los problemas de vientre. También es un fortificante.

Se comprende por qué, además de su forma de lanza, representaba el arma favorita de los mazzeri con la mazza (tipo de maza), el hacha y el cuchillo. Era el símbolo de la fuerza.





viernes, 23 de septiembre de 2016

La poesía de Bartolomé Pérez Sánchez de Medina

 Cerámica trianera de los años cuarenta
Con la imagen de la Patrona de Ubrique   
Se encuentra en una de las casas de la calle Botica


Por Esperanza Cabello

Hoy hemos tenido ocasión de echar un vistazo a varios programas de ferias de Ubrique de los setenta, y en ellos hemos encontrado varios escritos de don Bartolomé Pérez Sánchez de Medina.
Conocemos de él su faceta de escritor, de estudioso, de investigador... pero el lado poético de don Bartolo es, quizás, uno de los más desconocidos. En realidad todos los ubriqueños conocemos aquel poema que decía "Un acorde de luz y de alegría..." pero pocos conocen su primer  libro de poemas o los poemas que fue publicando en varios medios, sobre todo en los setenta.
Hoy presentamos "Al Convento de Ubrique".




Al Convento de Ubrique

Augusta fortaleza soberana
arca de piedra que conserva un rito
eco de oraciones por Dios bendito
que de la oscura tradición emana.

Ubrique, moribundo, exhala un grito,
el manto de la Virgen su mal sana.

Al vuelo se ha lanzado una campana
y un voto se levanta en plebiscito.

El docto buril del franciscano,
esculpe con dulzura en su aposento,
el lema monacal al artesano.

Un rayo de amor del firmamento
pulsa el alma sensible del cristiano
al cantar una salve en el convento.


Bartlomé Pérez S. de Medina


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miércoles, 21 de septiembre de 2016

La fuente de Cotrino

El acueducto de Ubrique. La fuente de Cotrino en primer plano, a la izquierda  


Por Esperanza Cabello  



La fuente de Cotrino fue, presumiblemente, uno de los primeros abrevaderos que se construyeron en Ubrique a mediados del siglo XVIII.

En 1723 se terminó, durante las obras para abastecer normalmente al convento de Capuchinos,  la construcción de la fuente de los Nueve Caños, y posteriormente se comenzó a construir  un acueducto que  salvara el desnivel del Nacimiento (en el Rodezno). Era un acueducto arcado que terminaba en un abrevadero con cuatro pilones de piedra caliza tallada.

Como se encontraba frente al conocido “Molino de Cotrino” (el primer molino que hubo en el pueblo y había pertenecido, en el siglo XVII, a los Duques de Arcos), con el tiempo esa fuente fue conocida como “La fuente de Cotrino”,   y fue la que surtió de agua corriente a toda la zona. La tercera fuente que se construyó fue la de la Plaza, con cuatro caños, y en la plaza e Zamora hubo igualmente (ya a finales del siglo XVIII) otra fuente con cuatro caños.

Cuando en 1937 se construyó el depósito de Cornicabra y se hizo la obra general para poder llevar el agua a todas las casas de Ubrique, la fuente de Cotrino desapareció, y justo enfrente se instaló la fuente de la Parra. Los pilones del abrevadero de la fuente de Cotrino se utilizaron como relleno, y actualmente aún deben de estar debajo del pavimento en la calle San Francisco.

Uno de los pilones fue recientemente descubierto durante unas obras (a finales de 2010) y actualmente se encuentra junto a la pila del Convento.


 El pilón de la fuente de Cotrino
Fotografía de Leandro Cabello


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"Este pilón formaba parte de la conocida "Fuente de Cotrino", una de las primeras fuentes construidas en Ubrique, seguramente a finales del siglo XVIII, era un abrevadero con cuatro pilones de piedra caliza tallada y se situaba al final del antiguo acueducto, en la esquina de la calle San Francisco con la calle Nueva. Fue destruida en 1937, durante las obras de traida de aguas a Ubrique."


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Nota del 22 de septiembre: En el primer libro de nuestro padre, Manuel Cabello: Ubrique, encrucijada de caminis juveniles, publicaba esta fotografía de los años veinte en la que se ve un poco mejor el abrevadero con los cuatro pilones, escalonados y cada vez más pequeños, el primero tiene casi el doble de capacidad que el último.






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domingo, 18 de septiembre de 2016

El ocho de septiembre de 2016

La procesión de Nuestra Señora de los Remedios 
sale de la parroquia de Ubrique   



Por Esperanza Cabello

 Este año el día de la Patrona de Ubrique iba a ser muy especial, y lo sabíamos. Formamos parte de una familia ubriqueña en la que la tradición y la devoción a la Virgen de Los Remedios ha sido realmente singular.
Para nuestras bisabuelas, nuestras abuelas, nuestras tías y nuestros padres ha sido siempre un día exclusivo, y nuestro hermano Francisco forma parte (hasta donde nos alcanza la memoria) de la Hermandad, de la que es secretario, además de ser uno de los porteadores de la imagen.
Para nosotros, como lo hemos vivido desde la infancia, también ha sido siempre un día memorable. Era el día en el que llegaban todos los miembros de la familia que estaban fuera, que todos se ponían sus mejores galas, que nuestras abuelas sacaban los mantones de Manila para adornar los balcones, que hacíamos comida de fiesta, que asistíamos a todas las celebraciones...
Y actualmente, por encima del sentido religioso de la procesión, para nosotros es la ocasión de hacer un homenaje a los que ya no están con nosotros, por eso desde que vivimos en la nueva casa tenemos una cita inexcusable el ocho de septiembre por la tarde.





Los primeros años nuestra madre, nuestras tías y nuestros hermanos se reunían en los balcones de la casa recordando a nuestros abuelos, a nuestro padre y a quienes ya no estaban con nosotros.
Este año ha sido terrible para la familia, además de los amigos que ya no están con nosotros, nuestra tía Carmen, nuestra tía Isabel, nuestra madre y nuestro tío José Luis nos han abandonado  en los últimos meses, por eso el paso de La Virgen por nuestra casa tendría para nosotros un significado diferente. Era la última despedida.




Así que engalanamos nuestros balcones para la procesión y nos dispusimos a acompañar a Nuestra Patrona a la salida de la parroquia. También nos ocupamos de acercar fotografías de nuestros padres para que, de alguna manera, estuvieran acompañándonos.
 



Como cada año, una multitud de ubriqueños y visitantes esperaba la salida de la Virgen, siempre es emocionante verla salir y comprobar cómo, una vez más, las tradiciones populares continúan vigentes. Para nosotros es, además, un orgullo ver a nuestro hermano Francisco y a su familia participando en todas las celebraciones.




Así que volvimos a nuestro balcón a esperar la llegada de la Virgen. Mientras nuestra madre estuvo con nosotros, cada año la Hermandad paraba el trono de la Patrona debajo de nuestro balcón (es lo habitual con los vecinos que están muy enfermos), y este año queríamos estar todos juntos en recuerdo de nuestra familia y especialmente de ella.
 
 

Manolo y Reme habían participado en la función de la mañana, Natalia, Jesús, Leandro y sus hijos estaban en la casa. Y todos estábamos esperando el paso del cortejo. 
A veces hacemos la reflexión de cómo tradición y modernidad se dan la mano en momentos especiales, y es que, por encima de todo, la fuerza de las creencias de nuestra madre ha hecho que todos las respetemos profundamente.





 Por fin pudimos ver cómo nuestra Patrona se acercaba a la calle, estábamos muy emocionados, recordando tantos momentos similares vividos con nuestras familias y nos disponíamos a despedirnos de Ella, en nombre de todos los nuestros, a su paso por la casa.



Y aquel fue uno de los momentos más emotivos que pueda vivir una familia, cuando todos juntos, con una fotografía de nuestra madre, pudimos despedirnos, en su nombre, de su Patrona.
La Hermandad nos hizo el honor de parar la imagen de Nuestra Señora ante nuestra casa, Francisco, María y Mari Carmen abajo y los demás arriba, todos pudimos desear lo mejor para nuestros seres queridos y despedir a nuestra madre una vez más.
También tuvimos ocasión de recordar a todos los miembros de nuestra familia que ya no están con nosotros y que eran, como nuestra madre, devotos de la Patrona.




Como siempre, el día ocho de septiembre fue un día grande en Ubrique, pero para la familia Cabello Izquierdo fue un día inolvidable; por encima de cualquier creencia, de nuevo tuvimos la ocasión de emocionarnos juntos y de sentir realmente lo que significa ser una familia.
Queremos agradecer a nuestro hermano Francisco toda su dedicación y a la Hermanadad de Nuestra Señora de Los Remedios no solo la labor que hace cada año, sino también la distinción que ha tenido con nosotros y nuestra madre al parar a la Virgen ante ella.



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sábado, 17 de septiembre de 2016

Gañotes vegetales





Por Esperanza Cabello

Tenemos la buena costumbre de pasear, cada vez que podemos, por el centro de Cádiz, hay vistas extraordinarias y paseos frescos y hermosos en los que pasar una buena tarde. 
Al parque Genovés vamos muchas veces, pero nunca nos habíamos percatado de un pequeño detalle. Esta semana nos acompañaba una pequeña ubriqueña (íbamos a ver los patos y los dinosaurios de la cueva) y de pronto dijo. "Mira, gañotes".
Y es que, efectivamente, los cipreses están podados como si fueran gañotes. La verdad es que llevan ahí toda la vida, siempre han estado podados con formas diferentes, geométricas, artísticas... pero nunca habíamos pensado en los dulces ubriqueños.

Al principio del verano nuestro hermano Leandro nos sugirió publicar la receta del helado de gañotes y, como no hemos tenido ocasión, aprovechamos estos gañotes vegetales para darles una idea a los magníficos jardineros de SAU, a ver si dentro de poco también podemos ver en Ubrique unos "gañotes veganos", aquí les dejamos algunos modelos.







miércoles, 14 de septiembre de 2016

Entrega de premios de pintura en la Caseta Municipal

 La alcaldesa de Ubrique, Isabel Gómez García, con dos de los `premiados
Javier Chacón Corral  y David García Ramos



Por Esperanza Cabello

Hoy es el primer día de la Feria de Ubrique y, aunque no somos muy feriantes, no hemos encontrado mejor ocasión de ir al real de la feria que asistir la entrega de premios de los diferentes concursos y certámenes  de pintura y dibujo que han tenido lugar a lo largo del año en la localidad.
Nos ha llamado muchísimo la atención ver la cantidad de certámenes que el ayuntamiento ha convocado este año, tan variados y tan premiados.
Nos había invitado al evento nuestro amigo David García Ramos, que había obtenido el primer premio en el Certamen de Pintura Villa de Ubrique (en este enlace) pero hemos tenido la gratísima sorpresa al encontrar a tantas personas amigas premiadas.

Comienza la entrega de premios

La Caseta Municipal comenzó su actividad hoy pasadas las dos de la tarde presentando el acto de entrega de premios que iba a tener lugar. Han sido muchos los galardonados, al principio menores (que ya hemos citado en este enlace)  y posteriormente adultos. 
(Por respetar la privacidad de los otros menores, solo publicamos las fotografías de los alumnos del IES Las Cumbres, a los que conocemos y nos han dado su permiso para publicarlas).
La entrega de premios ha estado presidida por la alcaldesa, Isabel Gómez, la concejala de Igualdad, Magdalena Burgallo, la concejala del Mayor, Virginia Bazán y, por supuesto, el concejal de Cultura y Festejos, José Manuel Fernández Rivera, al que felicitamos por haber comenzado la feria con esta actividad cultural.

Javier Chacón Corral recibe su Premio del Certamen Juvenil de manos de la alcaldesa


Javier posa con su flamante título


 David García recibe de manos de la alcaldesa su Primer Premio del Certamen Juvenil
David comienza sus estudios de Segundo de Bachillerato de Artes este curso



 David con su título y su premio en metálico
¡Un artista prometedor!



Clara María García recibe su Mención de Honor de manos de Virginia Bazán

Clara, alumna de Segundo de Bachillerato de Artes,  nos muestra feliz su premio


 Ángela Gómez Ordóñez, segundo premio en la categoría Juvenil 


Y una vez terminada la entrega de premios infantiles y juveniles, fue el turno de los ganadores absolutos de los certámenes.



Paco Solano recibe el premio de manos de la alcaldesa

Nuestro amigo Paco Solano Carrasco había ganado el primer premio del  Certamen Local de Pintura "Villa de Ubrique", con el cuadro "Asseyez-vous, s'il vous plaît" (en este enlace).
¡Enhorabuena, Paco!





En este Certamen obtuvo un segundo premio Patricia Mateos Diánez con "La Pila de la Plaza" y nuestro querido Manuel Janeiro Menacho una Mención de Honor por su obra "El perrillo". Lamentablemente Manuel no ha podido asistir a la entrega de premios, nos hubiera encantado añadirlo a nuestra galería de premiados. 



Cuarteto de ases: los artistas locales acompañando a los premiados

 Antonio, José Luis y Martel, acompañando a los premiados en los certámenes que han tenido lugar en nuestro pueblo durante este año, nos presentaron a Antonio Barahona Rosales, un joven pintor sevillano que ha obtenido el Primer Premio del más prestigioso de los certámenes ubriqueños.

Antonio Barahona Rosales

Antonio consiguió hacerse con el Primer Premio del LI Certamen Andaluz de Pintura "Villa de Ubrique", otorgado el pasado tres de septiembre (en este enlace) con la obra titulada "Límite primitivo".
¡Enhorabuena, Antonio!




La alcaldesa de Ubrique entrega el primer premio del  
Certamen Andaluz "Villa de Ubrique" a Antonio Barahona



El joven pintor sevillano recoge su galardón, finalizando así la entrega de premios de los certámenes de pintura del ayuntamiento de Ubrique.

Ya solo nos queda dar la enhorabuena a todos los premiados y también a todos los participantes en estos concursos, realmente Ubrique es un lugar de magníficos pintores donde van dejando su huella y su impronta grandes maestros que consiguen hacer de nuestro pueblo un pueblo de artistas.


 Pilar García, alcaldesa de El Bosque, e Isabel Gómez, alcaldesa de Ubrique



Finalmente desearles a todos unos días felices en la feria de nuestro pueblo y, como hoy es el día dedicado especialmente a la mujer hemos elegido a dos estupendas representantes, las dos jóvenes alcaldesas de Ubrique y El Bosque, a las que nos unimos para desear a todos una 

¡Feliz Feria de Ubrique 2016!
 


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